Fotos de boda en Mallorca

Fotos de boda en Mallorca

Por Rosa del Valle

“LAS FOTOGRAFÍAS ABREN PUERTAS AL PASADO…” (Sally Mann) 

Pasan los años y un día por casualidad, nostalgia o aburrimiento vuelves a mirar las fotos de tu boda en Mallorca. ¿Qué puede pasar?  Puede que te dé un ataque de ansiedad  como cada vez que las miras. Sigues deseando prenderle fuego al álbum, ese álbum que solo compró tu madre como buena madre que es.  

– “Cariño, si guardo todas tus  orlas desde  la guardería Quesitos  ¿Cómo  no voy  a cogerlo?”  

-“Porque es una mierda mamá, por eso”.  

En realidad también le prenderías fuego al fotógrafo, al que tuviste que llamar 10 minutos antes de la ceremonia porque no había aparecido.  

-Tengo la tienda a reventar. ¿Cómo la voy a cerrar ahora?  

-¿¡¡¡¡¡Porque tienes una boda!!!!?- Estas cosas  pueden pasar si no eliges bien, incluso que te pida que te tires en un barrizal para conseguir la foto que gane el World Press Photo 2020.  

También puede ocurrir que al ver las fotos  no puedas parar de reír. El estilismo que elegiste era como el de esos días de entretiempo  en los que no sabes que  ponerte y al final decides ponértelo  todo: Cancán,  mangas de farol, puntilla, volantes, pedrería, abalorios de cristal, velo y corona de princesa Disney….Seguro que pensaste: -“Una  solo se casa una vez en la vida. Voy a comprarme un vestido súper sencillo que lo tenga todo”. Eso ahora ya no pasa porque las novias se compran el modelo de día y el de tarde-noche. O incluso 3 si eres Alba Carrillo y el Hola patrocina tu evento.  

Por último y lo más deseable es que cuando mires las fotos de tu boda en Mallorca te emociones igual que  el día que las viste por primera vez.  Quizás  ya se os rompió el amor de tanto usarlo, pero  no importa porque estás espectacular en todas las fotos. Tienes un recuerdo de todos tus invitados, incluso de aquellos que ni conoces porque los invitó tu suegro en un momento de exaltación de la amistad. Las miras y dices: “No podría elegir solo una”.   

“LA GENTE DICE QUE LAS FOTOS NO MIENTEN. LAS MÍAS LO HACEN” (André Kertesz) 

Pensad en esos anuncios de perfumes en los que salen hombres y mujeres que no son de este mundo.  Esos,  que estoy segura se crían en granjas  y cuando por fin crecen lo suficiente, les dejan salir solo para las fotos. Lo sé porque yo nunca me he cruzado con nadie así por la calle. Para esos comerciales, las marcas no se conforman con cualquier fotógrafo, no. Contratan al mejor. Y digo yo… ¿Para qué? ¿Por qué,  si son perfectos? No hayo respuesta lógica para ese misterio así que razono finalmente yo solita: Si ellos necesitan al mejor… ¿Qué no necesitaré yo para parecerme en las fotos,  simplemente a la mejor versión de mi misma?  

“UNA FOTO ES COMO EL RODAJE DE UNA ESCENA DE PELÍCULA” (Ouka Leele)  

Hace ya unos años, cuando Inma empezó en el mundo de las bodas, me pidió el favor de hacernos a mi novio y a mí unas  fotos de boda. En realidad se lo pidió a todas sus amigas porque yo no soy muy fotogénica. Sin embargo, después de muchas negativas tuvo que  conformarse con  mi persona. Lo hizo,  no  como un reto, si no como EL RETO de los retos. Pensó: ¿Qué mejor manera de demostrar lo buena que soy?

Tuve que ponerme el vestido de mi boda anterior y él, lo más elegante que encontramos en el armario. Mi  ex marido ya no conservaba el traje para poder prestárselo. A mí, la cremallera   solo me subía hasta las lumbares. Estoy segura de  que había mermado en la  tintorería. Otra cosa no me explico. Si algo puedo  resaltar del savoir faire de  Inma es lo mucho que te ríes mientras dispara el objetivo una y otra vez.  

Nos convenció para adentrarnos en un campo de girasoles que  daba más miedo que el de la película The Messengers. En un alarde de fuerza  física, mi novio, Máximo Décimo Meridio, comandante de los ejércitos del norte, general de las legiones Mérix, me levantó en volandas. Su intención era buena, pero con el impulso me rompió los tirantes del vestido y una cosa es sujetarlo por detrás y otra sujetarlo por todas partes. Recuerdo estas fotos de boda en Mallorca como las mejores de mi vida y así deberías recordar tú las tuyas.  

“LO MÁS IMPORTANTE ES VER AQUELLO QUE RESULTA INVISIBLE PARA LOS DEMÁS” (Robert Frank) 

Uno no debe elegir el fotógrafo al azar porque los recuerdos que guardas de ese día son para siempre. Tarde o temprano querrás volver a ver las fotos  y  emocionarte de nuevo. Ver a las personas que quieres…a lo mejor algunas  ya no están contigo, pero las fotos consigue que no desaparezcan para siempre.  Por eso es importante buscar a alguien que sepa captar sentimientos.

Las fotos de boda en Mallorca tienen que ser intensas, como las personas que aparecen en ellas. Sin darte cuenta,  hay alguien pululando por tu evento, captando todo eso que por la emoción y los nervios del momento tú no puedes apreciar en ese momento. No sabes si su cámara es buena o no, pero su ojo es fantástico y el corazón que le pone vale su peso en oro.  “No hay reglas para las buenas fotografías, son solo buenas fotografías”.  (Ansel Adams)  

Fotos de boda en Mallorca